22 Noviembre 2012.

La entidad paria sobre la tierra desde que el emperador romano Tito arrasara y conquistara Palestina, dos mil años después, se ha convertido en un Estado autoexcluido de la misma por criminal en todos los ámbitos del Derecho penal y en la inmensa mayoria del Derecho internacional. El Estado de Israel, creado artificialmente después de terminada la segunda guerra mundial, se ha convertido -por la magnitud tan grande de sus fechorías delictivas continuadas y por tanto contrarias y vulneradoras de todo Derecho y Ley- en el único Estado a prohibir políticamente de estar particularmente en Palestina y universalmente en cualquier otro territorio de la tierra. En base a esa prohibición, ahora cualquier Estado o comunidad de Estados tiene la obligación de emplear el uso de la fuerza, potestas, para hacerla valer y cumplir; por lo que la humanidad entera debe exigir a la Comunidad internacional, y sobre todo a aquellos Estados que son víctimas directas de sus fechorías criminales, que ejecute o ejecuten por la fuerza la calidad de la proscripción.

Así los Estados árabes y mulsumanes tienen el deber de utilizar la legitimación de la fuerza militar total para eliminar con éxito de Palestina al Estado criminal y proscrito de Israel. Sería deseable que lo hicieran de forma convencional con la garantía de la fuerza nuclear de alguno de ellos, por lo que hasta que lo hagan deben de ir acosándolo sin tregua alguna de caza y derrotándolo palmo a palmo parcialmente como a una aliñana monstruosa.

Crisoldeltiempo 

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