23 Abril 2014.

La inteligencia de un ser corpóreo superior a la humana solo puede haberse desarrollado y supervivir en unos poquísimos planetas del cosmos y bastante tiene con efectivamente existir; por lo que es absolutamente IMPOSIBLE que, desde que la Tierra es habitable, haya llegado vida alienígena a ella dado que dos mil millones de años no cubren las distancias casi infinitas e insalvables de una llegada de esa inteligencia a nuestro planeta. Y no solamente ésto sino que también es absolutamente IMPOSIBLE que llegue durante el resto de su existencia habitable como planeta. Unicamente las gentes imbéciles en grado sumo y las interesadas pueden decir que no estamos solos aquí y en prácticamente todo el Universo.

Los banqueros nacionalsionistas de Centroeuropa, a las órdenes de la casa Warburg, desarrollan principalmente en Alemania una tecnología y ciencia puntas basadas en vencer la gravedad y experimentar la ingeniería genética en el ser humano a comienzos del siglo XX que culmina con la derrota militar germana en el año 1.945, tras la cual todos sus científicos son llevados a U.S.A. para continuar trabajando ultrasecretamente en bases al efecto - siendo la más importante la del Area 51- en la construcción de naves antigravitatorias y en la creación de tripulantes híbridos de origen humano, pero ya a las órdenes de los banqueros nacionalsionistas norteamericanos integrantes de las casas Rothschild, Rockefeller y Warburg también unificada a las dos primeras.

Los accidentes en las pruebas de esas naves, todavía arcaicas, tripuladas por humanoides en los años siguientes implican la actuación de los gobiernos republicanos norteamericanos para encubrirlos y taparlos creando al efecto en 1.947 el Majestic 12: comité secreto de científicos, líderes militares y altos oficiales del gobierno formado bajo la dirección del Presidente estadounidense Harry S. Truman con el objetivo de evaluar dichos accidentes -del que el más representativo y conocido es el que sucedió en Rosswell en ese mismo año- y de información a los siguientes Presidentes de la nación. Y el Proyecto Libro Azul, desde dicho año también, para confirmar, quince años después, que ninguna nave avistada procedía de fuera del planeta Tierra ni representaba peligro y amenaza algunas para la seguridad nacional de U.S.A.; de acuerdo con todo lo dicho y manifestado constantemente por la A.T.I.C. (Centro Técnico de Inteligencia Aérea). Así los dos gobiernos de U.S.A., el aparente del Estado y el efectivo del nacionalsionimo, quedaban salvados del conocimiento de toda la opinión pública y del eco de la prensa libre interesada al efecto.

Los convulsos años setenta de siglo XX -por la maximización del precio del petróleo, con la reducción extractiva del mismo venido del monopolio de Oriente Medio para frenar vía costos productivos el acelerado desarrollo económico de Europa, y la resistencia de la Unión Soviética a ser restada en su influencia geopolítica mundial- hicieron tentar a los nacionalsionistas norteamericanos con la posibilidad de sacar a la luz su arsenal de medios tecnológicos avanzados para desequilibrar a su favor el resultado final de una nueva guerra mundial no nuclear.

Hoy día, con la caida mundial de su sistema de esclavitud y dominio por agotamiento, nuevamente los nacionalsionistas se ven tentados a utilizar toda su tecnología y ciencia ultrasecreta, pero todavía no determinante, para salvarlo y regenerarlo; pero ya es demasiado tarde porque las naciones más importantes la tienen en vigilando constantemente para a la espera neutralizarla y copiarla, siendo por ello que se lo están tanto pensando.

Crisoldeltiempo.

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