3 Agosto 2012.

Hoy mismo y por casualidad he leido el EDITORIAL del País titulado "La batalla por Alepo", he intentado dejar un comentario sobre el mismo y al no haber podido hacerlo lo traigo aquí como una denuncia pública sobre el mismo.

Sr. editorialista no suelo leer nunca cierta prensa española en la que se encuentra la suya por contaminante, cromprada y sectaria, pero hoy al aparecer ante mis ojos dicho editorial en las noticias de prensa sobre Siria lo he hecho; no he dado crédito alguno a lo que estaba leyendo, diciéndome constantemente si era posible la realidad del mismo o era una paranoia probablemente la más aberrante que se haya escrito.

Puedo disculpar a cualquier periodista artículos más o menos dirigidos bien por conservar su puesto o bien por ganarse algún dinero, pero lo que no puedo ya pasar por alto es que un periódico se convierta, desde su editorial, en el ariete apologístico de la propaganda más miserable al dictado y servicio de su dueño bajo la gran bóveda de la libertad de pensamiento y expresión.

Todo medio de comunicación es libre de llevar la tendencia opinativa que considere mejor pero no es libre de que se convierta en un instrumento divulgativo de engaño, falsedad, manipulación y agitación.

Crisoldeltiempo.

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