23 Enero 2010.
El hombre, como dice Freud, no es bueno siempre y sujeto de dar y recibir cariño sino un ser muchas veces agresivo por instinto que utiliza al prójimo para atacarlo sin consideración en la consecución de deseos y apetencias. "El hombre es un lobo para el hombre".
Son las pasiones animales del hombre las que le llevan a poner en peligro la relación con sus semejantes y aunque la CULTURA Y EDUCACION realizan esfuerzos múltiples para poner límites importantes no son suficientes, por lo que se hace necesario el cambio cualitativo de la fuerza instintiva del deseo para perjudicar del hombre en razón y conciencia para beneficiar. Se trata de mutar el impulso original del super-yo hacia el beneficio propio por la mentalidad adquirida del beneficio hacia los otros. ¿Cómo?, pues haciendo sociedades y civilizaciones más humanas y perfectas. Si la colectividad evoluciona a grados mejores y superiores los individuos no humanistas que la integran tendrán muy difícil continuar con su genética primitiva heredada.
Crisoldeltiempo.
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